¡Es todo una cuestión de actitud!

   Tu actitud determinará que el puesto que deseaste y supiste conseguir siga siendo tuyo. Cada empresa tiene sus particularidades: historia, cultura, normas, etc y una

ACTITUD POSITIVA hacia tu trabajo y hacia las personas que te rodean te aportará SIEMPRE y te ayudara a que te desempeñes mas eficientemente.

Aquí te dejamos algunos comportamientos a tener en cuenta :

• Trabajo en equipo: La unión hace la fuerza!, que tengas una actitud receptiva, de aprendizaje, que te muestres y efectivamente que no solo te muestres sino que también te propongas a cooperar y preguntar aquello que no entiendes  marcara la diferencia. Debes pedir ayuda cuando no puedes; la queja no contribuye. Busca soluciones, pide ayuda. Recuerda que no existe la NO comunicación, siempre estamos comunicando y si hay algo que nos damos cuenta todos (en mayor o en menor medida), es cuando alguien no está a gusto en su trabajo, demuestra desinterés o simplemente algo le irrita. Si no quieres dar esa comunicación, revierte esa situación y busca comunicarte de manera efectivamente.

• Ser proactivo: adelántate, infórmate, aporta en la medida que te den el espacio, una critica constructiva aportando soluciones es mejor bienvenida que una critica sin aportar la mejora. El espacio se gana y a veces solo tienes una oportunidad para ser escuchado, y más en empresas con estructuras solidas y verticales, busca esa oportunidad y aprovéchala.

• ¿Cómo te relacionas en el trabajo?: Mantener relaciones sanas con compañeros , jefes y colaboradores es fundamental en esta cadena. El respeto es un derecho adquirido, pero depende de ti que se mantenga o que no se transforme en una relación tóxica. Aprende a poner limites y a comunicar aquello que creas que no corresponde. Un NO a tiempo es mejor que modificar una premisa en una conclusión. 

• Comunícate asertivamente: busca dar un feedback de una manera distinta. Comunica también de forma positiva!, evita el NO, úsalo cuando realmente haga falta. A veces decimos cosas que pueden parecer que son positivas, como podría ser: “no quiero estar enfermo”. En realidad, la frase positiva no es esa, la frase es “quiero estar sano”. Y así con cualquier otra expresión en la vida cotidiana, prueba el poder que tienen las palabras!.

“Me gusta más y me siento mas eficiente cuando realizo otra tarea diferente a la que me han asignado”

“Esto esta mal hecho” “Si esto se realizaría de esta manera seria mejor porque… “

“No corras”  “ve despacio “